miércoles, abril 18, 2007

EL MUNDOTORTILLA DE TOM


Me enteré el otro día, por las noticias, de la gran cantidad de peseticas (bueno, euros… No, dólares) que le van a pagar a Tom Hanks por hacer la secuela de “El código DaVinci”. De la cifra exacta no me acuerdo; se ve que la cantidad de ceros que tenía no me ha cabido en la cabeza porque, aunque la tengo grande, está ya casi rebosante de mierdecillas del estilo (¿ceros? Probablemente).
Me dio por imaginarme que cada pesetita (venga, céntimos de euro) era una pequeña tortilla de patatas. Sí, del tamaño de los minicéntimos. Si son seis mil millones de pesetas, pues, sencillo, seis mil millones de minitortillas. Fue fácil imaginar las tortillitas por unidades, pero el conjunto… al conjunto le pasó justo lo que a los ceros: que no cabían en mi contenedor de cacas varias. No hubo manera de representar tantas tortillas, aunque fueran pequeñas. Luego probé con huevos, cerillas, alfileres, taperwares e incluso con piojos. Sólo pude imaginarme un montón y, por supuesto, estaba íntimamente relacionado con el espacio en el que me encontraba; haciendo un esfuerzo, conseguí que todo lo imaginado rebosara un poco hasta caer por las ventanas. Y hasta ahí. Y pensé ¿será lo que yo me imagino, ese montón, algo aproximado a seis mil millones de algo? No sé, porque nunca he visto seis mil millones de nada. Sé, porque algo sí sé, que en el mundo hay seis mil millones de personas, pero nunca las he visto juntas y, por lo mismo que antes, me cuesta mucho imaginármelas a todas. ¿Será una incapacidad mía? ¿Será que nunca he visto tanto de nada y por eso no puedo imaginármelo y si lo viera, todo cambiaría y sí que podría hacerme una idea? Será, será, o mejor, será, que se lo debería preguntar a alguien que haya visto tanto de algo. Sí. Al Mundo se le podría decir: oye macho, ¿Qué se siente con tanta gente encima y cómo lo ves? ¿Qué parecemos? ¿Puedes compararnos con algo para que me haga una pequeña reconstrucción de los hechos? ¿Sabes de algo similar en número, que yo haya podido ver, y no lo sepa? Podría decir, si hablara: puffff, es la ostia chica ¡Ni te imaginas! Pero claro, hay que ser muy grande, tanto como yo, por ejemplo, para tener mucho de algo y no salir muy mal parado (aquí carraspearía, dando a entender algo que yo, por supuesto, no pillaría). Mi truco es teneros a todos repartidos por aquí y por allá, para que haya minitortillas para todos (aquí me pondría roja, porque significaría que el Mundo lee lo que escribo. Jo, vaya un honor), y por eso no puedes imaginarte nada parecido. Mundo sólo hay uno, chati. Entonces, llegaría a la conclusión de que sólo el mundo y Tom serían capaces de tener seis mil millones de cosas varias, y otras más, y llevarlo bien. Bueno, vale, de acuerdo. Es que ¡Tom es como el mundo! Es grande y generoso y en él y sus peculiares fortunas hay una minitortilla para todos. Aunque, mirándolo bien, seguro que el mundo no dona nada a ninguna ONG. No, no hay registros que indiquen lo contrario ¡Será capullo el tío! Con la cantidad de millones de seis mil millones de todo que tiene y no dona nada. Definitivamente, el mundo es un inhumano. Decidido, mañana hago las maletas y me voy a vivir al mundotortilla de Tom.